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Meditación del Arcángel Ariel: Sincronización Galáctica

El Arcángel Ariel para el Día de la Luz

Celebrando el Solsticio y la entrada al nuevo Ciclo Galáctico.

 (Esta meditación pueden hacerla  siempre que quieran sincronizarse con el pulso de la galaxia)

 Desde los confines de la galaxia, todo lo que es, todo lo que existe  se regocija en un hermoso momento, único, de celebración de la Luz!!!

Amados, respiren la luz que llega  en estos momentos a sus corazones, dulce y profundamente. En cada respiración sientan como se expanden sus campos  y que reciben la alineación galáctica de los soles, sincronicen sus latidos con la pulsación del mismo centro de la Galaxia. A cada respiración háganse conscientes de que en este momento preciso, todo resuena al unísono para que los campos se unifiquen en un oleaje de Paz y Amor Divino.

Ahora, realicen una respiración consciente y activa.  Al inhalar, el aire asciende por sus fosas nasales, realizando el  trayecto en espiral, en el sentido de las agujas del reloj, finalizando en el centro de su coronilla, lo notarán  fresco al ascender, reténganlo unos segundos en su corona,… al exhalar siéntanlo caliente e impúlsenlo hacia arriba,  cual un chorro de luz multicolor que brota como  una flor de loto. Mientras la realizan, suelten cada músculo, todo punto de tensión en sus hombros, espalda y cuello.

Y repitan otra vez esta respiración consciente, ascendiendo el aire en espiral, ahora en el sentido contrario a las agujas del reloj, siéntanlo fresco en la subida, retengan unos segundos en la corona y lo vuelven a soltar otra vez, emanando un loto multicolor,  y alcanzando un estado de claridad, paz y relajación.

Con esta respiración sientan que han activado los cristales en sus glándulas pituitaria y pineal así como los dos hemisferios: femenino y masculino.

Ahora, dirijan su atención al centro de su pecho, aspiren de nuevo, conduciendo verticalmente el aire hacia su corona, noten la frescura, retengan unos  segundos y dirijan  el aire, al exhalar, al centro de su pecho, relajando los hombros y la parte de la espalda comprendida entre los dos omóplatos, noten el calor en este punto. Disfruten de una sensación de apertura.

 Repitan de nuevo la respiración, aspirando hacia la corona, reteniendo, exhalando al centro del pecho, relajando el espacio entre los omóplatos, notando el calor…

Ahora han activado el cristal en su glándula timo.

Recuperen una respiración lenta y profunda, notando  la vibración en su pecho, expandiéndose y expandiéndose.

Ahora visualicen, como un rayo de luz desciende desde el centro de su pecho y se conecta con el corazón de la Madre Tierra, noten la sincronización  de su corazón con el pulso de la tierra, siéntanse parte de ella, estableciendo una profunda comunicación amorosa…noten el anclaje a través de las plantas de sus pies, perciban el hormigueo, el magnetismo que les une.  Sientan esta sensación en perfecto estado de comunión.

Coloquen sus manos en el centro de su pecho, noten el calor, la vibración, respirando acompasadamente.

En este momento, prepárense para tomar   contacto con a su Yo Superior y pedirle  que les acompañe en este proceso. Visualicen un cordón plateado que les unifica a través de las coronas, gocen la inmensa fuerza que les da esta conexión,  notando como su nivel vibracional  aumenta sensiblemente. Respiren y sientan físicamente la sensación.

Ahora su cuerpo de luz realizará una  conexión completa con su Yo Superior. Noten  su presencia detrás de Vds.  Manifiéstenle su intención  de unirse con él a través de sus chacras principales,  notarán un anclaje lumínico en cada uno,  una fuerza que les sujeta: en su corona,… raíz,…. corazón,… laringe,…  plexo,…chacra sexual. Sientan relajadamente la conexión y respiren inhalando una sensación de plenitud.

Céntrense de nuevo en el centro de su pecho, noten el calor y la vibración.  Ahora, y en comunión con su Yo Superior, pidan sincronizar su corazón  con el pulso del mismísimo centro de la galaxia. Sientan como su corazón va sintonizando la pulsación,…   pidan acoplarse al unísono con ella… y  en este preciso momento, respiren y sientan  la frecuencia y la pulsación en su pecho. (pausa)

Pidan ahora,  recibir  la alineación galáctica con  El Sol Central, Alción,… El Sol de Sirio, …..Nuestro sol…, su propio corazón  y el sol-corazón de la Madre Tierra.  Sientan  como esta alineación les transmite el principio sagrado de la creación, su origen galáctico,  despertando sus memorias a fin  recordar  quienes son y de donde provienen. Sientan la conexión con todos los seres que sincronizan  en este instante sus corazones,…. reconózcanse en el uno,…. visualicen a su familia de luz,….. sus guías, ….. los seres angélicos que les acompañan, …..los maestros galácticos… Agradézcanles  su apoyo, su luz,… su compañía…busquen sus miradas y hagan contacto visual percibiendo  todo el amor que emana de cada mirada, ..Reconózcanse con cada uno,  en un abrazo….

Dirijan ahora, la atención a su tercer ojo,  visualicen sus propias manos para mantener la consciencia en su visión interna, sus palmas, dedos, sus líneas, vean todos los detalles posibles en ellas …  Es ahora, en este momento  único e irrepetible, ante vds. aparece una espiral inmensa  …, respiren profundamente y déjense llevar por esa espiral cuya energía es el Amor, el  amor puro e incondicional…. déjense llevar  hasta mismo centro, transitando por un camino de luz resplandeciente……. observen todas las maravillas que les ofrece la panorámica de su visión interior….atentos a cada detalle, cada sentimiento, sensación, visión, mensaje… que vayan recibiendo durante el trayecto y que iran grabando en su recuerdo, al llegar al centro entren en un estado de meditación contemplativa…(pausa larga para visualizar).

Poco a poco vayan regresando, conectando de nuevo con su respiración y sintiendo la fuerza de su anclaje con la Madre tierra… sientan sus pies, sus piernas, sus manos, sus brazos…vayan estableciendo contacto con cada una de las partes de sus cuerpo, conecten con cada órgano, cada célula, cada molécula, cada átomo, cada electrón. Háganse presentes y plenos. Entren en el aquí y el ahora.

Agradezcan  amorosamente la asistencia a su Yo Superior, y a todos los seres de luz que les han acompañado en esta sincronización galáctica. Sientan el nuevo pulso que palpita en sus corazones, sientan su divinidad y su pertenencia,.. sostengan la luz,  la vibración….  llenos de amor, de intensa energía, alegres, valientes y preparados  para co-crear la Nueva Tierra en esta era de Luz que ahora empieza.

Y recuerden que son seres divinos viviendo una experiencia humana, que son y que serán, siempre,  apoyados e infinitamente amados.

El Arcángel Ariel

Namasté